ubik

MADRESELVA

La poesía no es más 

que el reconocimiento inconfesable

de saberse prisionero

 

no hay alba en el edén 

ni tampoco noche

donde se estrellen hordas de cuervos 

 

sin embargo la largura del alma 

es escalofriante 

y aspira a vencer 

este gris atronador 

que cae como un redoble minimalista

 

qué tosca se vuelve mi cabeza 

alumbrada por la tos del vecino

 

aún estando dispuesto

a piratear los barcos del sol

con la luna a mansalva de mi parte