Anabell López Rodríguez

Eras..fuiste...fuimos...

Eres mi más oculta felicidad

que me importa que no fuese completa, que fuese de migajas, que hoy ya no sea,

me basta con recordar.

Eras mis despertares con sol,

eras mis noches desnudas,

eras mis tardes de risas,

eras poesía en mis letras,

eras mis insomnios más eróticos,

eras tus manos en mi piel,

mi piel sobre tu alma.

Eras mi cara de tonta, mis silencios,

mis palabras, eras mi única canción.

Eras mi lluvia, mi viento,mi tierra

eras mi fuego, mi agua clara,

mis pensamientos de día, 

el sueño de todas mis noches,

mi más sublime oración.

Eras mis sentimientos en conflicto

la paz de mi cuerpo intranquilo

la guerra entre mente y corazón.

Eras mi único camino, un sorbo de libertad,

eras mi lugar seguro, mi destino final.

Eras el lugar donde mi alma reposaba feliz, dónde mi cansancio podía descansar. 

Eras tantas cosas que ya no son.

Fuiste mi tabla en medio del mar, 

fuiste el remedio a mi dolor,

fuiste miradas, besos, poemas, roces, placer, lujuria, amistad.

Risas ensordecedoras, fuiste

y no me cuesta decirlo, la razón de mi vivir.

Fuiste todo para mí.

Extraño mis taquicardias y mi respiración agitada, 

toda esa adrenalina circulando en mi sangre y que siempre tuvo el mismo final,

tus brazos abrazando mi cuerpo, 

mis brazos abrazándote a ti.

Eras, fuiste, fuimos.

Fuimos de lo que no se ha escrito en libros,

fuimos lo que nadie supo nunca.

Ladrones de momentos, repartiendo los minutos a nuestros antojos, a nuestros deseos, sin dejar sobras.

Fuimos de todo lo que hemos podido ser

y hoy, somos dos extraños .

Ya no duele, aunque a veces duele, 

porque si ya no me amas y no te amo,

aún eres mi vicio sin rehabilitación?