Freddy Kalvo

¡Te quiero!

 

Cayendo está el aguacero

que aplaca las polvaredas

y rumbo al mar y su estero

va cantando aquel jilguero

por los montes y veredas.

 

Y en las frondosas montañas

cantando están ruiseñores

cuando junto a las cabañas

nutren siempre sus entrañas

nuestros eternos amores.

 

Y en los ríos y los mares

con sus aguas cristalinas

ahogaré mis pesares

y al superar valladares

venceré crueles neblinas.

 

Y en el cielo tan inmenso

brillando estará la estrella

con su brillo tan intenso

y mis ojos en suspenso

porque tú eres la más bella.

 

Y bajo el cielo nocturno

brillará quizá un lucero

con su nombre de Saturno

donde casi taciturno

te diré por fin… ¡Te quiero!