Nelly Castell

Y NOS HICIMOS

Y nos hicimos

 

Porque no somos estatuas colocadas

a la intemperie de lo divino y excelsa

creación, quisimos ser el uno del otro

mientras escuchábamos aquella canción,

la que te gustaba a ti y a mi por decir,

 

porque solo te miraba esa boca que hacia

sentir esa fuerza tan arrebatadora que la

pantalla desee atravesar y en tus brazos

estrechando suspiros con suspiros mirarme

en ese color pardo de tus ojos claros tentando

 a lo que no podía negar mi amor al chiquillo.

 

 

Me dijiste ¿tienes ganas? no pude negar

porque te mirabas en el brillo de mis ojos

que querían disfrutar un bello sueño

escapado del altar, a un lado lo legal

y te hice sentir el dueño, de mi cuerpo que

junto al tuyo lo hiciste llegar ¡qué delirio viví!

 

Mis senos los besabas y embargados de saliva 

le supiste dar el significado de la vida.

Dos aureolas se erizaban al contacto

de tu boca que ellas la disfrutaban,

 

cómo decirte lo que me producías querer

si pude darte mi consuelo en oscuras

tus noches sin placer y me sentí orgullosa.

 

Me arrodillé una y otra vez al encanto

de tus rodillas que besé despacio esperando

subir al trapecio que erguido me retaba.

Como una alquimista, subí, no me arrepiento

de habernos estrellado en esa pista que tocaba

tan salvaje y nos entregamos gotita a gotita

 

unas de las entregas a exhibir sin camuflaje,

nos hicimos humanos queriendo revivir

el segundo encuentro... deseo morboso que

 no se disimula.

 

Fuimos actores del amor pasional

y al sentirnos uno dentro del otro

como raíles ardientes, en la primera pista,

¡qué pesar! nos tuvimos que bajar. 

 

 

Mi Rey mago entró anoche, qué noche tan loca

y revoltosa, que me hizo sentir apetitosa

de lo que traía, en su mochila de sueños,

llenar las ansias mías. Y le dejé.

 

NellyCastell