Ivón Arce García

¡MADRE TIERRA!

¡Madre tierra! tu nombre en femenino

¡Tierra! nombre de mujer que has sido mancillada

¡Tierra! nombre de mujer que has sido utilizada

para engendrar vida.

 

Tú eres la madre tierra, lugar donde habito,

tres partes de ti son agua salada, más que dulce

que amadrigas las bestias oceánicas

y los miles de seres que nadan en tu nicho.

 

¡Madre tierra!

que sé escuchas el canto de sirenas en tus aguas,

y el gorgoreo inaudito de los trinos de miles de aves

que se mecen en las montañas y en tus peñas

¡Madre tierra! alma de mujer que vives afligida.

 

Que naciste airosa para proporcionarnos un hogar

lleno de generosos campos y tierras fértiles,

que buscaste al hombre, no para que te protegiera

sino para que te amara, y se han vuelto viles.

 

¡Madre tierra! que has fecundado entre tus huertos

frutas exóticas, mariposas monarcas, azules y cristales

flores hermosas delicadas, gentiles

desde orquídeas y narcisos.

 

¡Madre tierra!

con tu toque femenino

has formado mil paisajes,

pero esos mismos han sido violentados

por la mano del hombre.

¡Me identifico contigo!,

¡Me quedo contigo!,

no para sentirnos derrotadas

aunque sé, lo mucho que has sufrido

ahora con las lluvias ácidas

que manchan tu camino

atropellado por inhumanidad violenta.

 

¡Madre tierra! cómo me identifico contigo,

el hombre por naturaleza

es malo, inconsciente y despiadado,

no sabe hasta dónde vamos a parar,

se esconde en sus verdades mentirosas…

acobardado tira, ensucia, mata…

el hombre a desolado tu corazón cansado

¡Tierra mía! ¿A dónde vamos?

 

Me identifico contigo

porque sigo amando al hombre destructivo,

porque duele la inconsciencia del humano

hasta quitarte el suspiro,

porque te pide perdón y sigue

haciendo lo mismo,

lo mismo… lo mismo,

y llora para pedir clemencia

cuando tu enfermedad avanza y agonizas.

 

¡Madre tierra! No quiero verte morir

gran célula femenina,

que me hace fuerte de alma

aunque tu vista se debilita

la contaminación y los dióxidos te lastiman

tus ojos de agua, agua que da vida,

a quienes no tienen piedad y ¡Tú!, les das vida

 

¡Te usurpan! ¡Te necesitan! ¡Te necesitan y te usurpan!

¡Madre tierra! ¡Tierra madre! ¡Madre de tierra bendita!

¡Bendita es tu tierra madre! ¡Alma de mujer!

Nombre femenino

no estás sola, somos mujeres intensas, tú eres de tierra,

nosotras de carne y hueso, pero al fin mujeres.

 

¡Que luchamos por la libertad de tu alma

que es el centro de la tierra!

el núcleo de todo lo que en el habita

¡Madre tierra! ¡Tierra bendita!

Que alimentas al enemigo,

esperando que la bonanza del corazón cambie.

 

Que sigues teniendo fe, y esperas el cambio,

que el humano sea humano

que la tierra siga siendo tierra

y la carne… ¡carne!…

 

Ivón Arce García.

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