FELINA

MI MUSA AGONIZA

No puedo escribir un poema

 

que toque las fibras del ser,

 

que llegue al lector

 

y lo haga estremecer.

 

Será que mi alma esta yerta,

 

será que mi corazón no palpita

 

y el torrente de sangre

 

que convirtió en escarcha.

 

¿Adonde está la tinta de mi pluma?

 

Será que se quedó en el tintero

 

agazapada, revelada,

 

no queriendo poemas escribir.

 

Veo pasar las horas silenciosas

 

pero nada llega a mis neuronas,

 

pareciera que el destino

 

me hiciera una mala jugada,

 

dejándome un pergamino

 

con ausencia de palabras,

 

mi musa no responde

 

y está lenta esta agonía.

 

No tengo la sensibilidad

 

que en otros tiempos tenía,

 

en donde se desbordaba

 

el torrente de pasión

 

entre mis versos.

 

Todo es parco ahora

 

y el amor no me toca,

 

no siento las campanas

 

repicar en mi alma,

 

las mariposas de mi vientre

 

se han quedado sin alas

 

y el girasol

 

no da la cara al sol,

 

todo es sombrío

 

y tirito de frío,

 

presiento el final

 

ya mi musa agoniza

 

y felina se irá con ella.

 

¡Es mejor que no me esperen...

 

Voy al funeral!

 

Felina