JOHNNY MONTENEGRO

EL CONEJO QUE SE CREYÓ ARDILLA

Había una ardilla que se llamaba Lola

siempre estaba sola

y no tenìa cola.

Era la burla de muchos animales.

Pero para solucionar sus males

Dios le diò un consejo:

 

_vete en un espejo

¡eres un conejo!

¡y te percibiste mal!

¡tonto animal!

 

_¿acaso no te ves las orejas?

a un burro te asemejas...

El conejo preguntò todavía:

_Señor ¿entonces, no soy ardilla?