Gualberto Salazar

  En la rendija

    

Por la rendija de una ventana

que tiene mi alma,

de madrugada se cuela el aire,

es la esperanza,

es el deseo de trascender,

es bocanada

del aire fresco que me despierta

de madrugada,

duermo, sudando, siento que viene

oliendo a mar,

la brisa envuelve y me sacude,

he vigilado

por varias noches, veo que llega,

cómo se mete

en la rendija de una ventana

que mi alma tiene,

ahí se guardan los sinsabores,

las aventuras,

las que aún faltan y los momentos

tan especiales

que en el futuro yo viviré,

es la esperanza,

en bocanadas de viento fresco,

en el aroma

de mar salado, de suave brisa,

en el silencio

de madrugada, cuando los sueños

están muy vivos

y se entrelazan con ese viento,

con el sonido

que hacen las olas cuando golpean

la arena fresca

creando un mundo dentro del mío

con ilusiones

que tiene el alma que siempre lucha,

¡Ah la esperanza!

Siempre se mete por la rendija

de una ventana

que dejo abierta para soñar