Anabell López Rodríguez

Lluvia.

Llueve desde ahora sobre tu recuerdo, la lluvia golpea los parabrisas de los autos, la gente pasa, nadie existe, en mi mente solo tú y la lluvia.

Las gotas se resbalan por mis mejillas, resbalan sobre mi cabeza, sobre mi lluvia, sobre tu ausencia.

Si estuvieras conmigo, si no lloviera más dentro que afuera, si existiera vida más allá de tu partida, si me amarás tan solo lo que me amaste el primer día, si pudiera tocarte con un beso el alma y desnudarte con mi sonrisa, si pudiera cubrirte con mi paraguas, ya no me importaría que lloviera sobre mi blusa, sobre tu camisa.