Vogelfrei

Cuando nuestros abuelos

Desobediencia civil - Lucha sin final
Y ahora nos toca continuar la lucha
que hemos heredado de tiempos a tras
cuando nuestros abuelos luchaban y morirían
por conseguir la Sagrada Libertad.

 

 

 

Luchare toda esta maldita vida,
por qué si hoy se muere la rebeldía
será solo por simple cobardía.


Dare mi corazón a causas nobles
feroz contra tiranías innobles,
derramare mi sangre por los pobres.


Alzare mi puño por el caído
contra el tirano aquel que lo ha abatido,
con quien dio su vida yo estoy fundido.


Como se funden hoy nuestras canciones
contra el maltrato vil de los patrones,
tiranías que la vida corroen.


Las tiranías que hunden cada día
sus oscuras fauces en nuestra vida,
con su suero anestesia y esclaviza.


No hay perdón para el asesino a sueldo,
con la sangre en mis palabras se enceldó,
con la memoria social se condenó.


Memoria que nunca olvida el maltrato,
por más que hoy en vano yo trato y trato,
no puedo borrar la sangre en mis manos.


La sangre que en mis manos hace ruido,
sangre que no caerá en el olvido,
sangre de mis compañeros caídos.


Sangre que se mezcla con simple tinta
que incansable nunca quedara extinta,
es sangre que se mezcla con mi vida.


Se mezcla hoy con mi puño en rebeldía,
puño que al golpear no dudaría
en hacer caer toda tiranía.


Puños que airosos se elevan al cielo,
puños que hoy ya se levantan, sin miedo
en busca de otros puños compañeros.