MODESTOELPOETA1953

EL DULCE AMOR QUE PERDI, POR DEJARME DIRIGIR

Vivo en una nube de pena,

Quizás esté pagando la condena

De años atrás por una nena,

Que era más guapa, que una sirena…

 

Me tenía en sus manos

Y no la supe apreciar

Antia de mis, sentidos

En el cielo te podre a besar…

 

Aunque ya seremos almas

Tu vuelo buscaré mi amor,

Para sentir tus dulces alas

Y volaremos sin rencor…

 

Por encima de las nubes

Muy cerca de la luna,

Besare tus labios otra vez

Sentados en tu estrella…

 

Cuanto añoro, el ser querido

En toda su plenitud,

Así me sentía contigo

Lleno de juventud…

 

Amores sanos sin vicios,

Miradas embrujadoras

Que llenaban los vacios,

Con el olor de las rosas…

 

Y te deje marchar Antonia

Por los celos que dominaban

La ira, de mi tenue sinfonía

Que al oído, nos susurraban…

 

Que nacían en tu jardín

Eso si era amor, mi vida

Escuchando el violín,

¡Dios mío, cuanto te quería!

 

¡Amor puro amor, sentido desde el fondo del alma y el corazón  el que perdí, al decirte adiós Antonia!

 

Modesto Ruiz Martínez / 14/08/2010