Nacho Rey

A UNA CALAVERA

 

Esta cabeza desnuda estuvo floreciente

y que prácticamente, valiente contento

hoy ya, no miente y lento realmente

se ríe técnicamente de todo testamento.

 

Radicalmente y seguramente, vagamente

ya no recuerda sacramento y ni está sediento;

sonríe con acento muy silenciosamente

con sus huesos en equis hasta del pirata su cuento.

 

Parece que en mi piel el tatoo la cabeza

calavera esquiva la muerte y la vida

como un atraco de hambre y pereza

 

que  jamás se recupera su propia vida.

Esta cabeza es la malicia siempre en reposo:

te mira estando decoro siempre caprichoso.

 

                          NACHO REY