Don Martin

Cristi

 

En algunos sueños e visto hadas princesas y sirenas,

 

pero en ninguna de ellas,

los ojos de gata que adoro entre las cinco y las seis.

 

Bebo un cafe en mis solemnes silencios que disfruto siempre al atardecer

 

sin saber a veces que esos ojos tuyos ya no estaran en mi.

 

De lejos alguien te llama

 

A lo lejos

 

 

Entonces tu sonries Cristi, como siempre,

 

Y regresan tus perfumes

con el viento

 

Tus sonrisas con las flores

 

Y el dolor en mil colores,

 

entre las cinco y las seis.