susoermida

EL BESOS DE UNOS OJOS.

Por desgracia no tengo nada mas

que ofrecerte que una salmuera de besos

que tienen ojos y guitarras ampliadas

y adelantados acordes de tedios de espera

y dormitorios que gimen palpitando caricias.

 

Tengo tu piel olvidada y presente

sobre la leída norma de mi deseo.

Allí me seduzco en la espera.

Todo lo radiante pasa por tus ojos

esos ojos adobados en besos

y acaban en mi precisamente donde empieza

esta calle que lleva mis labios hacia ti.

 

Está el trazo de tu presencia

sentenciando la espera de esos besos

que quiero repartirte,

condena implacable que me persigue.

Almacén de esas ampliaciones

que guardan las sumas de una miel

que pregonas y la circunstancia

de conformarme con un beso de tus ojos.

 

Ire al resplandor de los sueños,

a los duermevelas y a la pesadilla de despertar

con el beso asesinado sobre mis labios.

 

Iré al trueno supuesto de la horizontal

postura y allí me empaparé de ti

con tus ojos cerrados y mi corazón despierto.