Sebafel

En mi ocaso al poniente yo me hundo

Al fondo de mi vida, allí donde se abren
las fauces (de la muerte) donde rebotan débiles
los sueños de mi juventud con los amores
ya expurgados de todo sortilegio,

ya ingrávidos de magia, de pasión sofocados,
allí, en aquel espacio, dispara hacia el oriente
una nueva figura como de soga y tarde,
de pasmosa quietud:

Ahora quiere la sombra condenarme
a poblar el silencio desde mi carne
con \"mis\" propios silencios. Quiere que me arrepienta,

quiere que muera. Mas yo he de repetir
que en mi ocaso al poniente yo me hundo,
y que me ahogo gustoso si el mar me pertenece.