Josefina Bravo

¡PADRE MÍO, DANOS FORTALEZA¡

En momentos así cuando la muerte de manera vil, ha golpeado nuestra existencia, padre mío danos fortaleza, para sobrellevar el cruel dolor que ensordecen nuestros sentidos, cuerpos  y mentes.

Padre querido ya no estas a nuestro lado, porque fuiste llamado para estar al lado del soberano, para ser parte del coro de Ángeles que cantarán preciosas alabanzas a su alrededor.

Gracias padre de la gloria por mi hermosa familia, gracias por los padres excepcionales que nos  regalaste, ellos fueron y serán la base fundamental para formar en nuestro haber,  excelentes hombres y mujeres valerosas, porque ustedes nos dieron las herramientas para afrontar con honestidad y con disciplina, todas los peldaños de la vida, donde la preciosa consigna es tener como protagonista de todas nuestras vivencias al poderoso gigante, el salvador por excelencia a mi Amado Jesucristo, nombre sobretodo nombre.

De tu mano padre querido conocimos el saber y la experiencia que te dio el tiempo, porque tus preciosos argumentos fueron y serán libros abiertos al mundo, fuiste  maestros de los maestros, porque tus enseñanzas fueron lecciones captadas y fielmente procesadas por quienes quisieron ser como tú, un hombre de excelsa virtud, lleno de preciosos preceptos, porque tu extenso intelecto era digno de admiración, porque Dios a ti te doto de una inteligencia prodigiosa, porque la lectura era tu fuerte, la única fuerte inagotable que nutria tus entendimientos, haciéndote un hombre diestro en múltiples ciencias y saberes.

¡Gracias padre por todo lo que me diste, gracias por ser y estar cuando más te necesite¡

ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA

POETISA DE JESUCRISTO

EL BAÚL-VENEZUELA

15/10/2.020

03:54 a.m