Miguel Angel Garrido

MATAN A BÊLIT

¿Recuerdas el amor de esa mujer

con ojos de sol claro y boca lúgubre,

sobre un mar tan profundo como triste?

Las horas te atraviesan con su frío,

sus voces del pasado y viejos sueños. 

 

Mira el país de tu deseo, el esplendor

donde un día te entregaste a sus abrazos,

escucha su latido de alegría,

remota y tan ajena. 

                             De esta imagen

-oh bella reina en un negro Valhalla-,

por la gitana piel con que ella te hería,

vuelves a tu vacío. Nunca imaginas

el triste curso que la vida sigue

cuando un día pasa y, de manera absurda,

los sueños mueren,

se pierde tu recuerdo

como en un tebeo de héroes sin carisma. 

 

Helado su semblante de amazona,

dormida la mirada,

indefinible

tu noche de deleite arrebatado

y oscuro. Matan a Bêlit,

su cuerpo

erguido enfrenta la noche inmortal.