Alexandra Quintanilla

Derecho de equidad

Luchar por la libertad de un solo género me parece la discriminación más estúpida. Se lucha por las alas del género indefinido, por la vida de quien fuese necesario defender. El indefenso puede ser hombre o mujer. Niños y niñas son violados y violadas al rededor de un mundo que no reconoce los círculos viciosos del mal psíquico. Me dañan, daño y al que daño daña. Es una cadena imparable que se va desencadenando a lo largo de la historia. Miles y miles de años atacando un mal sin cura. La blasfemia para el encadenado. Miles y miles de negros hermanos, judíos e indígenas muriendo como viles animales de campo, hombres y mujeres torturados. Ancianos y ansíanas maltratados y maltratadas. Si lucho para que la mujer sea libre y no oprimida, me veo en la obligación de luchar por los niños y ancianos que yacen en el fango de la indiferencia social, de lo contrario me uno al innumerable conjunto de estúpidos que pelean a su propio beneficio, egoístas. Uno no debería andar por las calles pidiendo derecho de género, hasta la propia igualdad me suena incorrecta, creo que más bien debería de irse pidiendo equidad universal hacia el indefenso, hacia la naturaleza en sí y porqué sí, de lo contrario pido una utopía mediocre bajo el concepto de mi propio interés. Creo que las feminazis deberían entender que el mundo realmente no sólo es peligroso para ellas sino para cualquiera que no tenga las capacidades de poderse defender.