Estoy siendo testigo de mi perdición,
Gente veo pasar a mi derredor,
No sé como conquistas mi corazón,
Pero miedo tengo, de ser un perdedor.
Es rico estar amándote así,
Es sublime esta terrible ambición,
Absurdo no poder irme de aquí,
Por esperarte, en mi armónica adicción.
Me cuesta trabajo no quererte amar,
Huyo de mí, huyo de la soledad,
Pero me estanco en tu mirar,
Nada puedo hacer, ¡Es verdad!
Quisiera huir de esta relación,
Es curioso, es agradable este sentir,
No se como empecé la redacción,
Pero no puedo dejar de verte sonreír.
Y es que al mirarte me pierdo,
Al no tenerte, me cegó,
Siento el roce de una brisa,
Y me provoca tu recuerdo.
Es imposible dejarte de mirar,
Es horrible no poderte esconder,
Me cuesta aun mas no poderte dejar,
Y es que te empiezo a querer.
El sol en lo alto resplandece,
Me cega y no me deja ver,
Apareces tú y me engrandeces,
Sin duda, lo mejor que puedo tener.
Tus besos, tus labios, tu boca,
Tus abrazos, tu cuerpo, tu calor,
Conquistas todo, rompes la roca,
Alteras todo, me provocas un temblor.
Y es que no se como escapar,
Me encuentro en un pozo sin fondo,
Quiero y no te puedo olvidar,
Lo intento, y junto a ti, lo pierdo todo.
Espero no mirarte más,
Espero no volverte a sentir,
¡Olvídalo! No me dejes jamás,
Pues sin ti, creo, voy a morir.