Carlos Hector Alvarez

AUN ES TIEMPO DE SEMBRAR...

No me llores cuando ya no esté,

ámame hoy, que estoy vivo y a tu lado

mañana, tal vez sea demasiado tarde.

Arrepentirse de lo hecho será en vano

no alivia el dolor, ni trae paz al alma

solo engendra remordimientos y vacíos.

Escuché decir a una viuda cierta vez

de lo mucho que lloraba al comprender

que amargaba a su esposo,

como deporte, practicado día a día.

No lo acompañaba en sus salidas

por no perder tiempo en arreglarse.

Rechazaba sus invitaciones a pasear

porque no le apetecía caminar,

prefería ver televisión, leer

o tener compañias distintas, a la suya,

llámense hijos, nietos o amistades,

todos le importaban más que él.

No había dialogo, ella lo ignoraba

nada, nada los unía, Más un día

el destino se cobró tanto desdén

él murió en un accidente,

lejos de ella, fatalmente

era tarde para hacer algo por él

Hoy daría cada minuto de su vida

por volver al pasado y remediar

su falta de afecto al comprender

todo el amor que él le brindaba.

Que no te pase a vos lo mismo, piensa

mientras hay vida, todo es posible

nada está perdido, si hubo fuego

seguro que cenizas quedan.

Siempre es tiempo de esperanza

no deplores lo perdido.

Obvio, es fácil llorar lo que se ha ido

lo difícil es olvidar lo descuidado

Por imposible que parezca, no dejes

que el amor se aleje herido

como un sueño mal parido

cuando hay tiempo para verlo renacer.