Caminamos nuestra vida, a pie andamos y a cuesta nuestros pies cansados. Recorremos el mundo con nuestros pies descalzos. Calor o frío pero a pie andamos. Nos enseñan matemáticas, también de geografía, y no sabemos en que punto aprendemos filosofía, nos convertimos en psicólogos y un poco de poeta un día...pero descalzos aún andamos sin conocer a la vida.
Nuestros pies cansados desean descansar un día y nos sentamos ahí donde la matemática resulta inútil mucho más la geografía, entonces apreciamos los cuentos de tardes en el campo con nuestra tía, recordamos los rios, los campismos y a esa amiga, los amores que un día fueron y hoy los ves en otra vida, pies cansados de derrotas, pies más sabios de ironía.
Caminamos sin cansancio, hacia un nuevo amanecer, nos asaltan mil preguntas nuestro barco de papel, pero seguimos andando con la hoja y el pincel dibujando tantas veces nuestra historia en nuestra piel, pies cansados, pero a pie.
Sin conocer a la vida, criticamos, censuramos, nunca la mano damos, pies cansados como ayer.....zapatos queremos para cubrir nuestros pies, primero cubramos el alma de amor y de sencillez, prefiero seguir descalza antes de morir por sed, por nunca construir un pozo por miedo a caer en el.... pies cansados, pies sin piel.