Yajaira Vargas

EL BESO DE LA LUNA ...PARA GUILLE

Un cuatro de septiembre se unieron nuestros cursos, y bajo el manto de la luna nos dimos muchos besos. Aún recuerdo aquel día en que me enseñaste los ojitos de Santa Lucia…
No existen palabras como describir tu partida, hoy sólo quiero escribirte lo que dejé en silencio aquel día.

Hoy tomo mis recuerdos de las romanzas de nuestra autoría, donde las gaviotas volaban furtivas a encontrar otro nido donde se sentían queridas, o como cuando se iluminaba el cielo con esa luna tuya y mía de las cuales escribimos miles de poesías, también pasa por mi mente aquella noche sentados junto al mar, con su arena blanquecina donde contábamos las estrellas y el tiempo se detenía y sólo se escuchaba el latir de nuestros corazones danzando de alegría.
Hoy cinco de septiembre me deja como paradoja en mi alma entristecida la noticia de tu lamentable partida.
Justamente el día del “Beso de la Luna,” sé que no te lo perderías.
Hoy lloro, lloro amargamente pues no me dió tiempo a despedidas. Ni siquiera pude decirte lo que significaste en mi vida…
Eterno solaz de mi alma entristecida.