Federico Rivero Scarani

Y en sus ojos

 

Y sus ojos se detuvieron
en los labios de su amada
pensando que eran sus ojos
los que verdaderamente hablaban.
Por cada milímetro de la sonrisa
cien mil cometas surcaban
por el universo de aquellos cabellos cortos
que suspendían a la misma Nada.
Él escuchaba lejanas palabras
a la luz del celular entre las sombras
sombras de un Tiempo antiguo
con brisas de auroras pasadas.
Desde lo más profundo de sus Células
descubrieron un Secreto vedado:
se percataron que se escucharon antes
cuando la luna se hubo apagado.
Todo no fue lo mismo para Ellos
al sellar con tres besos el pacto
adormecidos en sus nieblas astrales
sus labios, sus ojos, se evaporaron.