Elisa es

La presa, otra vez.

Me piden que grite lo que siento, 

Como si fuera yo un político carroñero.

Me piden que desgarre mi amargura y 

El delirio, sin metáfora ni verso 

...Como si fuera yo, algún demente cuerdo. 

No, prefiero sonar en el silencio, 

Abrazarme en las esquinas, 

Soportar el dolor, como quien bebe el trago

Amargo, más amargo que existe. 

Me piden que me exprese para todos, 

Como si todos quisieran escucharme, 

Como si al menos escucharan algo. 

Si, prefiero no tener y sufrir por no tenerlo todo,

Prefiero el hambre antes que engañar al arte. 

Prefiero lanzarme, súbitamente al mar que ha de matarme,

una y otra vez, una y otra vez...