Joel Torres

CARTA AGÓNICA

Cuando sueñes con mi recuerdo,

encontrarás a un lado

de mi café con metáforas,

una pluma impregnada

con mi sangre y pedazos

carbonizados de mis huesos.

 

Aún quiero contarte mis sueños,

mis alegrías, mis penas

y los \'\'te amo\'\' rastreros.


Duele amar

tus dudosos juramentos,

porque aún está presente el dolor

que agobia mis adentros

y aunque calle mis voces

y aunque apague mis luces

aún así no encuentro el sosiego.

 

Aún quiero contarte mis cuentos 

así tu libro tenga por hojas témpanos,

que más da, si más gélido fue tu desapego

y me acostumbré, porque estaba ciego.

 

Me hace padecer

tu preámbulo traicionero;

¡Ayúdame a luchar!,

estoy en esa esquina fúnebre

pidiendo un pedacito de tu seno

o dos o tres gotas de tus besos.

 

No largues tu mirada,

que cada segundo es vital

para mis versos y si lo haces

una metáfora

se desquisiará con mi soneto.

 

¿Por qué tu ceño tan amargo?,

¿por qué tu burla tan grosera?,

¿por qué?, si yo abracé las candideces

por aliviarte los senderos.

 

Ya resigné mis ansias,

ansias de querer expresarme

con toda el alma,

este anhelo de querer decirte tanto 

y no poder decirte nada,

de volver a los sueños infinitos

a los quebrantos y consuelos.

 

Está de más decir

que solo soy el pintoresco

y tú eres la oda

que nunca existió en mi concierto.

 

©El Yarawix