Freddy Kalvo

Me iré...

Me iré solo, suspirando

cuando aparezca el ocaso

y la luz se irá opacando

sin reservas ni retraso

cuando el sol se esté ocultando

no lamentaré el fracaso.

 

Me iré feliz de este mundo

por veredas libertarias

con un sueño muy profundo

de mis noches temerarias

y de mi ser iracundo

en vigilias solitarias.

 

Me iré en silencio cantando

con mi voz enmudecida

pero libre iré soñando

por una senda florida

la justicia musitando

al final de mi partida.

 

Me iré quizá sin retorno

a un lugar inesperado

sin carantoña y soborno

tranquilo, libre y callado

dejando todo mi entorno

y añorando lo que he amado.

 

Me iré de noche o de día

como un pájaro volando

cuando la tiniebla fría

tenaz me vaya abrazando

lleno de melancolía

mi adiós les iré dejando.

 

Me iré con ojos cerrados

finalmente a mi destino

pero siempre enamorado

de mi andar tan peregrino

que quedará sepultado

a la vera del camino.

 

Me iré navegando iluso

por los mares de lo incierto

donde todo lo inconcluso

reposará en un desierto

y el dolor será confuso

cuando al final haya muerto.

 

Me iré silbando sonriente

por caminos de Alegría

sembrando dulce simiente

para honrar la poesía

y mi carrera docente

pero… ¡no ha llegado el día!