Rebeca Espinosa

LÁGRIMA

Dios, en tu infinita bondad me perdonaste

y sentí aun más, tu amor de verdad

mi corazón te agradece, porque me diste la paz

Hoy una lágrima, de dolor y arrepentimiento

a mi corazón llegó, por haberte ofendido tanto

Tu luz maravillosa ilumina mi razón

Haciéndome caer en cuenta lo grande de mi error

de tenerte tan cerca, y querer ser mejor

cada día, junto a ti mi mi Dios.