Estanislao Jano

Musa

Germinaste, semilla de la roca,

mano de cincel y puño de mazo.

Te he nombrado sin un nombre

como a una expresión tácita del cielo.

¡Como a una deidad!

¡Un anhelo!

¡Un pronombre de lumbre!

Con tu suspiro de alga en mí

para crearnos vida…

 

Ave de las almas…  tan tuya y  mía.

Hundiste tus pupilas como arca de promesas

Llegaste a  mí para herir de amor

mi soledad obtusa y tiesa.

 

Habitas el verso que está en todas las cosas

Tu amor es duna libre. 

¡Respira! ¡Levante y camina!

Tus huellas de trazos, senda divina,

de mi alma abierta…