I
Piel de mi alma son mis versos;
y hacia los pálidos árboles del cementerio me encaninan
a buscar el olor de una música,
la canción de una flor.
Piel de mi alma son mis versos;
En ellos se tuerce una noche sin luz
Y la melodía rota de silencio hiere los
Hilos de mi corazón.
Piel de mi alma son mis versos;
Se han oído doblarse en la tumba de su amor.