QUINSONNAS

Marioneta (Soneto)

 

 

 

Tirando de mis hilos a tu antojo

me tornas, caprichosa, en un muñeco

y un títere me vuelves sin arrojo

haciendo que parezca que estoy hueco.

 

Conviertes a mi temple en un despojo

llegando en lo inaudito a estar reseco

y colmas a mi paz de un gris sonrojo

al ver que con tu pose me desfleco.

 

Subyugas a mi ser con la sonrisa

y acabo transformado en un fantoche

comiendo de tu mano pizpireta.

 

Endeble, a mi razón, haces sumisa

llorándote, cautiva, cada noche

alzada en una simple marioneta.