Alat Saile

baldío de la tregua

vuelven aquellos días donde el ojo se abre de par en par

busca la sonrisa de los versos en la cara borrada

por detrás del vidrio el sol es un pedazo de plomo

brilla en el cielo irreversible

 

cada trago de cerveza es un pedazo de vidrio roto que escarba mi carne

cuando miro una taza veo solo una taza

cuando miro un cenicero veo el residuo de lo que no escribí

¿dónde están los días en que derramé vino sobre las letras?

arrimo un silla al baldío de la tregua

quiero dibujar caras

escribo inviernos

de todo el baile de insomnio poético

de todo el tabaco apagado en la lengua de la escritura

de todo lo que fuimos

este poema.