Freddy Kalvo

Como la brisa...

Sintió dentro del alma…

aquella fresca brisa,

la epidermis cautiva, suave, eriza;

como mueve la palma

sin daños y sin prisa,

así la percibió, tierna y huidiza.

 

Fue brisa refrescante…

y agradable su clima,

deseando envolverla con su abrazo

un segundo, un instante,

sintiéndose en la cima

pensando en construir juntos el regazo.

 

Fue brisa pasajera…

que lejos fue volando,

la epidermis nunca sintió la brisa;

y esperando, volviera,

solo quedó soñando

recordando su cálida sonrisa.