Alexander Vortice

DEBILITADA FIGURA

CORRE y no le digas a nadie que tienes miedo.

Corre y no dejes de correr ya que los lobos saben

que eres hombre herido, casi muerto…

No mires atrás y nunca más recuerdes quién fuiste:

rótula de ser vulgar que está a un paso de pagar

todos sus pecados.

Cuando llegues a averno –te advierto- te agarrarán

las cruces de fuego que nunca quisiste

para ti; verás entre las orlas de diablos eternos

la imagen rota de aquel que quisiste ser:

hombre que negó con su cabeza dolorida

cuando le preguntaron por la vida después

de la vida.

Corre y no dejes de correr por mucho que yo

me vea estático frente al camposanto.

Devórame un verso o una estrofa y no digas

que son de tu agrado; ruega por tus culpas

y enséñale a la dulce Muerte tu entristecida

y debilitada figura.