Alfredo Saez

-Vida en el Inhóspito Hormigón-

No sé cómo cantó victoria

Si creció entre ásperos sequedales,

Hormigón, ladrillos y la roca de la noria

Que del rocío tomó los humedales.

Cigüeña fue el viento que la trajo semilla

Una pasión por la Vida su placenta

En el patio de dura loza amarilla

Donde plantó febril su reino, cenicienta.

Con tropismos botánicos buscó rayitos del sol

El tenaz arraigo de nervaduras en fila

Con las extrañas providencias del amor

Energía vital de la clorofila.

Allí quedó la pobre, trémula plantita

Sin los besos de una bella flor

Ni las espinas de una mínima inquina

Solo el mimo breve de un oculto candor.