MARDON

CLAMAR A TU NOMBRE

Caldeándose los anhelos

se estremece el sentimiento

que habita en el umbral del ser,

en el cuerno de tu abundancia

el alma te alaba ¡hosanna al Rey

del Universo! que se hace presente

en cada partícula del firmamento.

 

Nada hay oculto que no sepas de mí;

sabes de mis dolores y mis horrores

de lo que más temo y lo que más deseo,

Y aun así, me resguardas bajo tu manto

me justificas porque sabes que hay en mi;

me confortas con los tesoros de tu palabra

ríos de agua viva refrescan mi aliento.

 

Tu amor me rescata en todo momento,

sentir tu presencia, me hace un milagro

de tu santo espíritu y solo puedo clamar

a Tu nombre, dar gracias a tu bondad infinita

que me hace excelente para adorarte Señor,

me exhortas día con día para no claudicar

aunque la senda sea espinosa mi copa rebosa.