Amalia Beatriz Arzac

Cuando estaba muerta

 

 

Cuando estaba muerta

 

 

  Deambular sin rumbo es una locura,
algo sin sentido, un destino vacío.
La luz de la luna alumbra la nada,
el sol no calienta, la lluvia no empapa.
El sonido profundo del triste silencio,
aturde la mente, nubla el pensamiento.
Las pupilas fijas, la mirada muerta,
la herida profunda rasgando tristeza
y en los pulmones el aire se espesa.
Mi sonrisa no era señal de vida,
recuerdo el palpitar de la agonía.
¿Recuerdas que estaba muerta?
¿Recuerdas eso? ¿...que yo no vivía?
Antes de hundirme en los mares
todo era difícil… tan complicado…
Y luego tú me sacaste brindado tu mano
con tu abrazo completo volví a la vida,
Por un momento todo fue tan claro,
como si el agua todo lo hubiera lavado
¿recuerdas eso? … también yo
Hoy que tu abrazo no entibia,
hoy que no duermes a mi lado,
me has puesto un corazón ,
gracias por ese regalo.

A.B.A 2018 ©
Amalia Beatriz Arzac
Buenos Aires Argentina