Alonso Moraga

Las Nuevas Canciones

¡Quién diría
que los cantos míos,
engendrados por mi alma sensitiva,
llena del dolor y de la noche fría,
se tornasen hoy indomables ríos
que corren siempre hacia la mar cautiva!

¡Quién diría que este amor que mece
mi espíritu sedeño,
parecido a un dulce sueño,
hiciera que el caudal que resplandece
resultara ser el dueño
de este suspirar que crece y crece!

Hoy el dolor, como neblina
que en el alba invernal
hace enturbiar el límpido cristal,
poco a poco se esfumina.

Y aparece, junto a la orilla
del eterno camino,
una hermosa luz que brilla
y señala mi destino.

Y surgen, como buenas intenciones,
éstas mis nuevas canciones
que dicen al alma: sois la mar,
sois la espera, sois la vida y el amar.

¡Oh mis nuevas
canciones, suspirar que llevas
las notas gentiles
de mi corazón enamorado,
dejad que el sentimiento amado
abra en ti sus placeres sutiles,
y que éstos mis versos juveniles
reflejen tu puro amor callado!