Franz Natera

Amar y querer.

Si querer de verdad casi es amar,

¿amar de mentira casi es querer?.

 

Entonces amar de mentira es no querer nada,

y querer de verdad es querer mucho.

 

Pero si tú no me quieres nada

y yo te amo muy poco,

entonces yo te quiero muy poco

y tú no me amas nada.

 

Porque amar no es querer con intensidad;

amar es con más intensidad que querer, 

pero querer...

 

¡Querer no es amar de verdad!,

porque queriendo se es feliz sin demasiada intensidad,

con mentiras y poca verdad.

Querer es con los ojos abiertos 

sin arriesgar lo poco que das.

 

En cambio, amando, no se quiere nunca más,

te olvidas del aquí y del allá,

de lo que eres y lo que serás;

porque queriendo quieres ser feliz,

y amando... Arriesgas tu felicidad.

 

Para amar no existe el tiempo,

y para querer se mide el tiempo.

 

Amar, algunas veces es una desgracia sin tiempo

y el tiempo es una desgracia que te obliga a amar.

 

Queriendo, te olvidas,

amando, ayudas a otros a olvidar.