Miguel Ángel Cisneros

Otredad

En las orillas de nuestro propio ser,

allá en la frontera de lo especulado,

está lo otro, lanzando reproches inaudibles

que chocan con muros infranqueables.

 

En el área limítrofe de nuestra conciencia,

se sublevan bárbaros -o tal vez nosotros

somos los bárbaros- ante su propio sistema,

queriendo conocer el nuestro, para adoptarlo,

o tal vez, imponer el suyo.

 

¿Estaré queriendo la misma fortuna?

 

Al otro lado -lugar donde este lado es

el otro- no sé qué hay, solo pienso que debe

ser un lugar maravilloso como este,

al que sus habitantes quieren cuidar, como

nosotros, porque es su casa, esta

es nuestra casa.

 

¿Habrá quizá casas de mármol,

calles forradas en oro?

¿Quién sabe? ¿Meditarán las

Mismas cuestiones que yo?