ARGON

ORO.

Como el toro burlado, como el toro,
con que se apoyó la vigencia del becerro de oro,
el consejo de un amigo es como vino generoso en copa de oro,
odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.

Aunque la sabiduría no puede adquirirse con oro,
si mil piedras me ofrecieran y las mil fueran de oro,
de más precio que el oro,
y ése es un baño de otro valor.

Vale más que un kilo de oro,
eran una cortina de fósforo,
quien lo halla ha hallado un tesoro,
o sólo cuanto lo que ignoro.

Desde que la vi la adoro,
pero no daño a la que adoro,
con un mínimo rayo doliendo en cada poro,
por oro no vendas lo que nunca podrás comprar con oro.

ARGON