ARGON

DESTINO.

Barro es mi profesión y mi destino,
para que tus bellos, ojos iluminen mi camino,
déjame quedarme en el horno divino,
con la segunda copa, el vino bebe  ese vino.

Entonces arcángeles del camino,
no darás tropezón ni desatino,
con la primera copa el hombre bebe vino,
al sur, clan, clan, los líquidos recorren su camino.

Disparará contra el asesino,
de la parva junto a pozos rebosantes de vino,
bordeando tu sonrisa parte de mi un camino,
el arte no es una cosa, sino un destino.

Del íntimo suspiro ,
lunar, solar, ardiente y frío, repentino,
y cada ola en el camino, acude como peregrino
yo soy el dueño de mi destino.

 

ARGON