jesus alberto porras

No hay sosiego en mi ser

Te extraño mucho
Y mi alma y corazón lo saben

no se porque pero te amo

sois con la que quiero pasar mis días asta el final

pero como es de esperarse

no ay sosiego
en mi ser desde que te perdí

en aquel tiempo de nuestra niñez

el sosiego yego

cuando mi corazón te encontró aunque ya no somos los mismos

solo dos erantes destrozados
sin ninguna compacion

tu en otro pueblo
Y yo en otra nación

que desgarrante
es este dolor

pues no bolbimos
a en contarnos

desde aquella ocación