Santiago Esquivel

Es un acróstico.

Militante del olvido,
Es mi corazón doliente.
Desde que dejaste de existir
Un suspiro quedó atrapado,
El cariño se ha marchado
La vida ya no existe en mí.
Estoy atrapado aquí
En ningún lugar del mundo.
Los paisajes me parecen espantosos.
Ahora solo soy un niño perdido,
Llorando por haberse ido.
Mirando como todo se vuelve olvido
A espaldas de la existencia.