Eduh Siqueiros

No compartimos dogmas

Se nos trastornó el amor en rutinas al forzarlo,
actos que empujaste al caos con pasiones en exceso,
evidenciando entre ambos cuán grande es la diferencia,
incompatibilidad de modos de amar, siendo tan diversos
prescindes con mordacidad del dulzor y la terneza,
anegada quedas en la furia de un tifón que te atolondra…
No quiero despilfarros de éxtasis en lo exuberante,
degustar del amor, en efecto, cursimente y con romanticismo prefiero.
Pertinazmente conservas a tus playas en hundimiento
y a los momentos de terneza les das escapes,
descubro hoy que no compartimos dogmas
y desilusiones mutuamente nos hemos de conceder,
cuando un adiós nos otorguemos con desconsuelo
al visualizar lo que ya hemos expuesto,
no fuimos hechos para ser inseparables
y me alejo porque te amo y me amo,
pero no hallo en ti, la miel que siempre busco
ni los arrumacos para mis mañanas y también infiero
que nunca me regalarás detalles cada día,
ni paseos ni abrazos ni jugueteos en la calle,
ni charlas ni júbilo que se eternicen;
comprende, este adiós, antes que todo se rompa
y que por caminos que sean distintos debamos irnos,
que al quedarnos juntos sólo vamos a dañarnos.