Escucho tu nombre y sólo puedo escribir minutas tristes
Tus hojas y raíces están llenas de recuerdos
Para muchos sigue siendo un flagelo la memoria
Tú padre vio llorar a Cortés
Ahora tú ves sollozando a los corazones rotos
Convives en el mismo espacio con la campana y otros amuletos
Tus hermanos crecen junto a un río
mientras tú eres prisionero en el concreto
Eres grande, frondoso y alto
Me gustaría dieras prueba de tu memoria
¿Acaso todas las noches recuerdas la historia que te contó tu padre?
Sé a veces lloras por la sangre derramada
Sé lloras porque te acongoja
Espero el próximo año te den una noche alegre
Que los 600 años que te quedan, no veas ni la tristeza, ni la muerte en tu regazo
Que en los próximos años seas árbol de triunfo y no de derrota.