Hace frio y no es porque el viento  Sople desde el sur  Y traiga tormentas gélidas Hace frio y es porque ella no está.     Una noche como esta,  Sin más luna que sus labios Sin más estrellas que sus ojos  Y sin más calor que el de sus brazos  La pude amar.     La alcancé a amar con lo que había de amor  En mi marchito corazón. Y ahora la canción canta: Ella se ha ido. Cambien de música que me desangro Que me hago jirones  Cámbienla porque siento que muero. Y la cinta repite: ella se ha ido.     Se fue, lo sé, pero mi alma no acepta haberla perdido  Y mi corazón no se contenta con haberla tenido. Se fue sin despedirse sin más equipaje que el de su propio cuerpo Y dejó un destello de recuerdos incandescentes  Que se prenden en noches como esta, cuando estoy solo.     Allá lejos está el cielo sin más firmamento  Que una capa gris redondeada  Y ella allá… perdida entre nubes  Quizá mañana cuando la luna salga redonda y majestuosa  Y las estrellas brillen como centellas  Y un viento sople calor desde el norte  Aparezca ella, sumisa, en un idilio que yo inventaré            Y entonces en el cielo más hermoso que jamás haya visto Dibujaré su rostro y la sentiré más viva que nunca.