Edna Diaz

Todo lleno de gracia

Cuando te vi y oí tu nombre por primera vez

me sonaba como río de agua entre piedras.

Para mí eras una acuarela llegado de Erin

Deslumbramiento en plenitud brillante.

Eras gratia plena,pero yo no lo era

para ti y mi dolor fue inmenso más

allá de toda expresión del alma.

Que yo pudiera sentir jamás.

Hoy repaso en mis recuerdos

y te digo: ¡Desgraciado,muérete ya!