Paleornis

ARENAS del libro de mi autorĂ­a \\\\\\\"SOL DE MEDIANOCHE\\\\\\\"

 Arenas, arenas, arenas.

Caminos de oro fino.

Luego descansar

en el Palacio de Qasr-al-Hair

el más espectacular de los palacios

del desierto.

 

Pasar por la Gran Mezquita

de Samarra,

fundada por el Califa

al-Mutawakki

con su techo sostenido

por veinticuatro hileras

de magníficas columnas.

 

La búsqueda es intensa.

Y en cada huella,

semejante a otra huella

en el desierto,

se despiertan silenciosos

los cautivos espíritus

milenarios.

 

Se perciben sus siluetas

en las cúpulas geométricamente diseñadas,

reflejándose en sus azulejos coloreados,

y la suprema belleza

de la tarde me acompañan hieráticos.

 

Ya el viento

ha borrado mis huellas,

como muchas otras

que transitaron las arenas.

 

Pero parte de mi espíritu

han quedado unido

al silencio de los siglos.

                                        Año 728