frankcalle

EL BELLO DURMIENTE

Tengo la sensación de estar dormido
o estar muerto.
Ni siquiera recuerdo quien soy.
¿Funciona mi cerebro?
Al menos creo que pienso…


Pienso, solo pienso…
No logro salir de este estado que no entiendo.
Solo silencios, múltiples silencios hay a mi alrededor,
como si el mundo se hubiese detenido de golpe,
como si todo no fuese un más que un sueño…

¿Dónde estoy?
¿Cuánto tiempo llevo aquí inmóvil?
¿Realmente estaré muerto?
Que recuerde, alcohólico no soy…


¿¡Muerto! ?
¿O casi muerto..?

Nunca me había preguntado qué es la muerte,
o cómo es la muerte…


¡Terrible sería! ¡Estar muerto pero vivo!
(¿O vivo pero muerto?


Apenas tengo ahora algunos recuerdos.
Poco puedo hacer…
Ni siquiera morirme, si es que ya estoy muerto…
No sé quién soy, ni cómo soy;
pero siento que fui poeta.
¿Acaso fui poeta?
En estas circunstancias sería la salvación…


Pienso, pienso.
Siento que me duelen las manos...
¿Pero tengo manos?
¿Acaso tuve un accidente?
¿Acaso me picó un insecto malvado?


Intento recordar ideas, y solo me llegan versos aislados,
bellos versos que claramente logro memorizar…
Son míos? De quién son?


“Mírame, madre, y por tu amor no llores:
Si esclavo de mi edad y mis doctrinas
Tu mártir corazón llené de espinas,
Piensa que nacen entre espinas flores.”


Obviamente no son míos,
solo un genio pudo hacerlos.
Pero definitivamente no importa saber quién soy,
si al menos puedo recordar tales versos.
Es como renacer;
es como despertar de un largo sueño…


Sí, me siento como dormido
y al mismo tiempo despierto.
Siento que han pasado más de 100 años…


(¡No! ¿Seré la Bella Durmiente, en espera de un beso?
Imposible, es solo un cuento… ¿Y quien fue esa durmiente?
Por lo menos algo recuerdo)


Pero en fin… ¿ estoy vivo o estoy muerto?
¿Podemos poetizar hasta después de muertos?
¿Soñar vivo o soñar muerto?
¡Qué importa entonces estar vivo o estar muerto,
si tengo para siempre la poesía, todo el tiempo!


Recuerdo ahora aquellos anónimos versos
que me conmovieron un día:


“No son muertos aquellos,
que en dulce calma,
de la vida reposan en la tumba fría.
Muertos son aquellos
que tienen muerta el alma,
y desgraciadamente viven todavía”


Definitivamente, si para siempre tengo la poesía,
¡qué importa estar muerto!

Frank calle (15/ ene/ 2020)