Raul Gonzaga

La verdad más perenne está en ti

 

En un templo que tengo en mi interior
Encontré aquel sutil, divino, aliento;
Maná del Cielo para aquel sediento
Que atravesó el desierto por amor;

Es ese dulce oasis salvador,
Que nos llena de vida y de contento
Y que sólo descubre el que va atento
A despertar el fuego del candor;

Es la secreta llave de la vida,
El fruto que está al medio del Edén,
La palabra que tildan de perdida,

Santo Nombre en el Libro del Amén:
Es la Torah, el Tarot, Luz de la vida,
De entre todos, eterno parabién…